La palabra hebrea Sucot significa “cabañas”. Durante los siete días de la festividad comemos todas nuestras comidas en la Sucá. La Torá así lo ordena: “Siete días viviréis en sucot... para que vuestros descendientes sepan que en sucot he hecho morar a los hijos de Israel cuando los saqué de la tierra de Egipto” (Levítico 23:42).
La segunda mitzvá que realizamos durante Sucot es la bendición sobre las “Cuatro Especies”. La Torá ordena: “Y tomaréis para vosotros en el primer día el fruto de un árbol hermoso (etrog), hojas de palma (lulav), ramas de mirto (hadasim) y ramas de sauce (aravot) y os regocijaréis ante D´s, vuestro Señor, durante siete días...”.
De acuerdo al Midrash, las cuatro especies representan las cuatro clases de personas que integran el pueblo judío. La mitzvá de combinar las cuatro especies promueve la idea de la unidad en el pueblo. El Talmud dice que el Etrog (cítrico), a diferencia de otros frutos, puede crecer en su árbol de año en año “uniendo” las cuatro estaciones y extrayendo nutrientes de todas ellas. La señal de un Lulav kasher (rama de palma) es que sus hojas estén “juntas”. Si las hojas estuviesen separadas, el Lulav no es kasher. Cada tres hojas de los Hadasim (ramas de mirto) crecen del mismo lugar en la rama del mirto. Finalmente, las Aravot (ramas de sauce) son descritas en el Talmud como “plantas que crecen en grupos”.
Sucot es llamado el “tiempo de nuestra alegría”, para que nos concentremos y entendamos que esas ocupaciones espirituales son las reales prioridades porque conducen a la verdadera satisfacción y felicidad en la vida.