"Y dijo el Eterno a Moisés : Ve al Faraón, porque Yo he endurecido su corazón y el corazón de sus siervos, para manifestar estas mis señales en medio de ellos"
Shmot 10:1
HaShem ordenó a Moshé y Aharón comandar al Faraón dejar ir a los Benei Israel. El predijo, "Yo endureceré el corazón del Faraón y luego multiplicaré Mis señales y maravillas en Egipto." Esto no significaba que el Faraón sería incapaz de arrepentirse porque HaShem estaba endureciendo su corazón. Las palabras del Todopoderoso implicaban, "Yo le daré una oportunidad de hacer teshuvá por la duración de las primeras cinco Plagas. Sólo si él después de eso persiste en su iniquidad Yo detendré de él Mi Mano Auxiliante que está lista para asistir a aquéllos que hacen teshuvá (arrepentimiento)."
Moshé y Aharón transmitieron el mensaje de HaShem al Faraón. Cuando el rey solicitó una señal, Aharón, en presencia de la corte Egipcia entera arrojó su bastón al suelo, y él fue transformado en una serpiente. El Faraón comenzó a reir. "¿Son éstas las maravillas de vuestro Di-s? se mofó. "¡Las personas usualmente intentan vender mercadería en un lugar donde se necesita, no en un lugar donde existe abundancia de ella! Nosotros los Egipcios somos los más famosos hechiceros en el mundo y ¡vosotros creísteis que podríais enseñarnos a nosotros magia! ¡Este truco es tan fácil para nosotros que hasta mi esposa sabe cómo realizarlo!
Él hizo señas a su esposa- quien en realidad era tan experta en brujería como todos los otros magos Egipcios combinados- y le dijo , "¿Véis a estos hebreos que han venido aquí para burlarse de nosotros?" El dio a su esposa un bastón, ordenándole convertirlo en una serpiente. Ella lo hizo. El Faraón se burló, "¡Aún los niños Egipcios son capaces de realizar esta suerte!" Ordenó que algunos niños de cuatro o cinco años fueran traídos y les entregó varas. Todos pudieron convertir los palos en culebras. El patio completo se llenó con retorcidas culebras. Los dos renombrados magos Egipcios, Iujani y Mamré, ridiculizaron a Moshé diciendo, "¿Intentásteis vos vender paja en Ofaraim, una ciudad superabundante en paja?¿Realmente creísteis que nosotros seríamos impresionados con vuestra magia en este país el cual originó el arte de magia negra?".
Moshé contestó, "Ese es precisamente el por qué HaShem me envió a mí aquí. Si alguien tiene buenas verduras para vender, las lleva a un mercado donde los compradores son expertos y las apreciarán." Las palabras de Moshé implicaban, "Eventualmente vosotros quienes sóis expertos en magia deberéis testificar la verdad, que nuestras maravillas no tienen sus orígenes en magia. Son fenómenos sobrenaturales los cuales pueden sólo ser logrados por el poder de HaShem." La serpiente de Aharón abrió su boca de par en par y devoró a todas las otras culebras que estaban deslizándose por el suelo. "Este truco es tan viejo como Adám," se mofó el consejero Bilám. "Todo el mundo sabe que una culebra puede tragar a otra. Que Aharón nos muestre si él sabe cómo hacer que un bastón trague a todos los otros bastones. ¡Si él es capaz de eso, nosotros sabremos que no es un hechicero común sino que es socorrido por la fuerza de HaShem!"
Un milagro ocurrió y la serpiente de Aharón se volvió nuevamente un bastón y devoró a todos los otros bastones. A pesar de ello, no era perceptible que recién había devorado docenas de varas porque permaneció tan delgado como antes. El Faraón tembló. "¿Qué si él ahora ordena a su bastón tragarse tanto a mí como a mi trono?" pensó. No obstante, como HaShem había predicho, el Faraón endureció su corazón y rehusó dejar libres a los Benei Israel.
Educa al Joven según su camino
Una de las mitzvot que se resalta en esta Perasha es la de la educación. La Tora nos dice: “Vehigadta lebinja baiom ahu lemor: baabur ze hasa Hashem li betzeti mimitzraim"– “Y diras a tu hijo ese día, diciendo: 'esto es lo que hizo Hashem para mí al salir de Egipto'". Dentro de nuestras obligaciones para con nuestros hijos, nos preguntamos ¿cuál es el mejor método para enseñar? Muchos libros e ideas se escribieron al respecto. Algunos sostienen que lo mejor es un marco de "severidad y rigidez", sin permitirle al pequeño su autodesarrollo, su libertad. Otros piensan que la severidad priva al joven de su crecimiento, como si le pusieran esposas en sus brazos. Hashem escribe en la Tora que Abraham fue un gran educador: "Porque lo conozco, pues el ordena a sus hijos y a su casa que cuiden el camino de Hashem". El Rambam en las Leyes de idolatría explica el sistema que aplicó Abraham: "Le enseñaba a cada uno según su pensamiento y lo encaminaba por las sendas de la verdad". Algo fundamental es saber acercarse al otro y en relación a su capacidad explicarle, ejemplificarle. Si el niño comprende es muy probable que obedezca, pues comprende la importancia del deber que le encomiendan. Cuando los iehudim estaban luchando por salir de Egipto por intermedio de Moshé, cada vez que Paró iba a permitirles salir, nunca lo quería hacer de manera absoluta, es decir que los dejaba salir solo parcialmente. Antes de mandarles la plaga de la langosta, Paró les pregunta ¿quienes van a ir? Moshé responde: "Con nuestros jóvenes y con nuestros ancianos iremos; con nuestros hijos y con nuestras hijas. Con nuestro ganado ovino y con el vacuno iremos, pues fiesta de Hashem es para nosotros". Moshé Rabenu puntualiza claramente la postura de la Tora. La educación, la enseñanza es para todos, no solamente para los hombres; ni tampoco específicamente para los mayores, todo lo contrario: en lo que respecta a Jinuj (educación) los jóvenes tienen prioridad. Lamentablemente, muchas de aquellas personas que argumentaban que la educación judía se debe postergar para cuando sean mayores, no fueron conscientes de las consecuencias de semejante error. Para corroborar con lo que estamos diciendo encontramos en Melajim: "y no lo entristeció su padre en sus días diciendo: ¿Por qué hiciste así?" El pasuk (versículo) nos relata cuál fue el motivo por el que se rebeló el hijo de David, pues su padre no lo reprendía. Cada hijo tiene una manera diferente de ser. Nuestra sabiduría debemos aplicarla en educar al joven según su camino. Rab Moshe M Hoffer