Leyendo muchos comentarios y resúmenes de la Parashá de esta semana me quedo con este concepto: "Escuchar". Una palabra que encierra mucho potencial. Qué tan importante es escuchar, y no oir, cuando uno oye algo no presta atención, en cambio cuando escucha, pone de sí para atender lo que está oyendo.
Sin embargo, la Parashá al comienzo literalmente dice "Vaishmá Itró...", si lo tomamos literalmente entro en desacuerdo con todos los comentaristas, "Itró oyó" lo que había hecho Di-s por Bnei Israel, como dice Rashi. Hasta acá uno puede asumir que el Sacerdote de un pueblo politeísta, aliado de Amalek, enemigo de Israel, como padre de la mujer de Moshé, supo/oyó, lo que había acontecido tras la salida de Egipto. ¿Qué oyó? Acerca de la partición del Iam Suf y la guerra de Amalek contra el pueblo de Israel.
A mí se viene a la mente que al oir sobre el segundo suceso, pero conociendo los milagros de Di-s, Itró comienza a escuchar. Se acerca a Moshé, acercándole a su familia (debido a que ellos no fueron parte de la salida de Egipto porque Moshé los mandó a vivir con su suegro), e intenta involucrarse en el pueblo de Di-s para no entrar en guerra como lo habían hecho contra Amalek.
Pero a todo esto, las acciones de Itró se van notando con actitudes limpias, los comentaristas nos explican que Itró es el primer guer tzedek (converso virtuoso), que fue conferido de este modo con una bienvenida real de Moshé, Aharón y los ancianos, incluso la shejiná (presencia divina) se presentó en su recepción al pararse frente a las nubes de gloria que protegía a los Bnei Israel en el desierto. El resto del texto y de las interpretaciones nos denotan que él decidió convertirse al judaísmo abandonando sus creencias anteriores. Además encontramos esto en el cambio de nombre, porque Rashi nos dice que Itró tenía 7 nombres, Rehuel (por su padre), Ieter (sacerdote de Midian), Itró (luego de convertirse, tras el agregado de una letra se le cambia el nombre de Ieter por Itró), Jobeb (por su amor a la Torá), Kinei y Putiel.
Con todo esto podemos afirmar que Itró escuchó, porque detrás de un oír, que al principio parece vano y por conveniencia termina siendo el medio que justifica el fin (y no al revés). Itró lo asesora a Moshé para que delege tareas, que se dé cuenta que no podía estar tratando todos los temas, entonces es cuando le dice que nombre jueces, que delege sus tareas más terrenales, que sólo las consultas más complicadas lleguen a él.
La parte central de esta Parashá y que no podemos dejar de mencionarlo es que se entregan, por medio de la potente voz de Di-s, los Aseret HaDibrot, los 10 mandamientos, no se entregan las tablas de la ley, sólo se enuncian cuáles son las palabras que los Bnei Israel debían conocer y aceptar, como dice el texto "Haremos y Escucharemos" - "Naasé VeNishma". Nuevamente encontramos la palabra cuya raíz es Lishmoa - Oír.
Mi interpretación es que los Bnei Israel dicen "haremos y oiremos", pero aquel momento en que hubo truenos y relámpagos y una nube densa sobre el monte, y una voz de shofar muy fuerte que estremeció a todo el pueblo que estaba en el campamento (Shmot 19:16), y se hizo presente la Shejiná y la acción se convierte en "escucharemos", es la llamada de atención que los Bnei Israel necesitaban para el momento en que Di-s comenzaba a detallar cada una de sus palabras.
Cómo me enseño una Morá, los animales oyen y ven mientras los humanos escuchan y observan.
Quiera Di-s que este Shabbat comencemos a ser humanos dejando el instinto animal de lado, aprendamos a escuchar, a prestar atención a lo que oimos para que esas palabras que nos transmiten las podamos procesar y entender, y así poder tomar acción.
Shabbat Shalom
Sergio Man