וַיֹּאמֶר הֲכִי קָרָא שְׁמוֹ יַעֲקֹב וַיַּעְקְבֵנִי זֶה פַעֲמַיִם אֶת־בְּכֹרָתִי לָקָח וְהִנֵּה עַתָּה לָקַח בִּרְכָתִי וַיֹּאמַר הֲלֹא־אָצַלְתָּ לִּי בְּרָכָה
"[Esav] dijo: ¿Se llamaba entonces Iaakov para poder suplantarme estas dos veces? ¡Primero me quitó mi primogenitura
y ahora me ha quitado mi bendición!. Y agregó: ¿No me has reservado una bendición?". Bereshit 27:36
Es muy común ver en toda la Torá que un nombre deje una marca. Acá el hebreo bíblico juega con las palabras y Esav interpreta la acción de su hermano Iaakov con la raíz de su nombre. ¿Será profético el nombre que nos asignan, marcará nuestras vidas, tiene importancia saber por qué nos tocó determinado nombre?
Relata un cuento lo siguiente: "Siendo todavía pequeño me perdí en una tienda mientras mi madre compraba regalos de Janucá. Lo recuerdo bien, me aparté de mi madre y fui a la puerta de entrada, contemplé las gotas de lluvia que se deslizaban por los vidrios, y cuando me di vuelta, mi madre se había ido y me sentí perdido. Mucha gente se reunió alrededor mío, pero yo no conocía a nadie, eran personas grandes y yo era muy pequeño, estaba asustado y me eché a llorar. Luego el gerente me tomó de la mano y me preguntó: ¿Cómo te llamas? - Dan Segal, contesté. Y cuando dije mi nombre sucedió algo maravilloso: dejé de llorar, me sentía extraordinariamente bien porque sabía mi nombre y podía decirlo; entonces me sería fácil encontrarme con mi madre. Todo estaba en orden... Yo era alguien porque conocía mi nombre".
Si bien este cuento tiene otros objetivos, el punto a considerar es cuán importante es adueñarnos de ese nombre que nos pusieron al nacer y personalizarlo, ya que los nombres pueden repetirse, pero la personalidad la creamos cada uno.
En este juego de palabras que tiene de rico el hebreo encontramos que el nombre de Iaakov tiene varias acepciones, pues su raíz ע.ק.ב puede no sólo significar talón, debido a que - וְיָדוֹ אֹחֶזֶת בַּעֲקֵב - "su manó tomó el talón", o significar algo curvado o torcido - עָקֹב - en contraposición a algo recto - יָשָׁר - (como luego será su nuevo nombre Israel), también esta raíz está relacionada con los verbos suplantar o emboscar, como así lo traduce el Targum: "me ha emboscado" וַיַּעְקְבֵנִי - traduciendo las palabras del mismo Esav en este versículo.
Dice Rashí que cuando Itzjak oyó esto se dio cuenta, o se enteró, que Esav había otorgado (vendido) la primogenitura a su hermano, y por tal motivo se dijo para sí: "he bendecido realmente al primogénito y también bendito será", por tanto cuando Esav le pregunta si no tenía reservada o aparatada una bendición para él, es que le dedica palabras acorde a su personalidad.
El nombre, el sobrenombre, el apodo, el alias, es algo que nos ponen o nos ponemos y marcan nuestra identidad. ¿Alguna vez pensaste si tu nombre refleja tu historia y persona? Te invito a pensarlo.
Shabbat Shalom
Tec. Sergio Man
Baal Tefilá, Baal Koré, Baal Tokea, Talmid de Melamed (VHH)
Noviembre 2021