Bᵉmidbar 10:10 "Y en el día de vuestra alegría, en vuestras fechas, y en los principios de vuestros meses, tocarán con las trompetas sobre vuestros holocaustos y sobre vuestros sacrificios pacíficos, y será por ustedes para recuerdo delante del Dios vuestro. Yo Soy el Eterno, Dios vuestro. וּבְיוֹם שִׂמְחַתְכֶם וּבְמוֹעֲדֵיכֶם וּבְרָאשֵׁי חׇדְשֵׁיכֶם וּתְקַעְתֶּם בַּחֲצֹצְרֹת עַל עֹלֹתֵיכֶם וְעַל זִבְחֵי שַׁלְמֵיכֶם וְהָיוּ לָכֶם לְזִכָּרוֹן לִפְנֵי אֱלֹהֵיכֶם אֲנִי יְהֹוָה אֱלֹהֵיכֶם׃"
En un mundo marcado por la incertidumbre, el individualismo y la constante búsqueda de satisfacción personal, el mensaje de esta semana nos invita a redescubrir el poder transformador de la alegría compartida, la comunidad y la presencia de Di-s en nuestras vidas. Las trompetas nos recuerdan que la vida no se trata solo de desafíos y luchas individuales, sino también de momentos de celebración y gozo colectivo. Es en estos momentos que nos unimos como comunidad, agradecemos las bendiciones recibidas y elevamos nuestros espíritus hacia lo alto.
En tiempos modernos, muchas veces nos encontramos atrapados en la rutina diaria, olvidando la necesidad de detenernos, reflexionar y celebrar nuestras bendiciones. La Torá nos enseña a utilizar estos momentos de alegría y solemnidad para reconectar con lo sagrado, para recordar nuestra relación con el Creador y para renovar nuestro compromiso con los valores espirituales y éticos. Cada acción y cada momento tiene un propósito y estamos llamados a vivir con intención y significado.
Más allá de las fiestas señaladas, la Torá nos invita a cultivar una actitud de celebración en lo cotidiano. Encontrar la belleza en lo simple, agradecer por las pequeñas victorias y compartir momentos de alegría con nuestros seres queridos son acciones que nutren el alma y fortalecen los lazos que nos unen. Las trompetas también simbolizan la convocación. En un mundo fragmentado por divisiones y conflictos, el sonido de las trompetas nos llama a reunirnos, a dialogar, a construir puentes de comprensión y a trabajar juntos por un bien común.
Es en la comunidad donde encontramos apoyo, fortaleza y aliento para enfrentar los retos de la vida. Es en la comunidad donde nuestras voces se unen para crear una sinfonía de esperanza y transformación. El sonido de las trompetas nos invita a abrir nuestros corazones a la guía divina, a buscar su sabiduría y a encontrar en Él la fuerza y el consuelo que necesitamos.
Aunque en la actualidad no practicamos los rituales de ofrendas y sacrificios de la misma manera, el concepto subyacente sigue siendo relevante. Las ofrendas simbolizan nuestro compromiso y dedicación. Nos recuerdan que debemos ofrecer lo mejor de nosotros mismos, no solo en términos materiales, sino también en nuestras acciones, nuestras relaciones y nuestro servicio a los demás. En un mundo que a menudo valora lo superficial y lo inmediato, este mensaje nos invita a profundizar y a vivir con integridad y generosidad.
Que el sonido de las trompetas nos inspire a cultivar una vida llena de alegría compartida, comunidad profunda y conexión con lo divino. Que seamos instrumentos de paz, unidad y transformación en un mundo que anhela más que nunca escuchar el canto de la esperanza.
¡Shabbat Shalom! ¡Shalom al Yisra’el, Shalom al olam!
Moré Sergio Man
Junio 2024