וַיַּשְׁכִּימוּ בַבֹּקֶר וַיִּשָּׁבְעוּ אִישׁ לְאָחִיו וַיְשַׁלְּחֵם יִצְחָק וַיֵּלְכוּ מֵאִתּוֹ בְּשָׁלוֹם׃ 
"Y se levantaron por la mañana, y juraron el uno al otro; y los despidió Yitzḥak, y partieron de él en paz" Bᵉreshit 26:31

La historia de Yitzḥak nos anima a ser personas de paz, a abordar los conflictos con prontitud y a comprometernos sinceramente con la reconciliación. Después de algunos desacuerdos y conflictos anteriores, Yitzḥak y ’Avimelekh decidieron buscar la paz y la reconciliación. Se levantaron temprano y se comprometieron mutuamente a establecer una alianza y una amistad duradera. Se juraron uno al otro un juramento que no solo fue un compromiso verbal, sino una expresión de sinceridad y compromiso.

וַיֹּאמַר  יְהֹוָה אֱלֹהֵי אֲדֹנִי אַבְרָהָם הַקְרֵה־נָא לְפָנַי הַיּוֹם וַעֲשֵׂה־חֶסֶד עִם אֲדֹנִי אַבְרָהָם׃
"Entonces dijo (el siervo de ’Avraham): El Eterno, Dios de mi señor ’Avraham, envíame, lo ruego, delante mío hoy y sé bondadoso con mi señor ’Avraham" Bᵉreshit 24:12 

’Eli‘ezer, el siervo de ’Avraham nos enseña la importancia de la oración. Él antes de partir en su misión, de buscar una muchacha acorde para Yitzḥak, ora a Di-s pidiendo que le muestre una señal para encontrar a la mujer adecuada.

וַיִּתְפַּלֵּל אַבְרָהָם אֶל־הָאֱלֹהִים וַיִּרְפָּא אֱלֹהִים אֶת־אֲבִימֶלֶךְ וְאֶת־אִשְׁתּוֹ וְאַמְהֹתָיו וַיֵּלֵדוּ׃
"Y oró ’Avraham al Eterno; y sanó el Eterno a ’Avimelekh y a su mujer, y a sus siervas, y parieron." Bᵉreshit 20:17

Este episodio nos enseña una valiosa lección sobre la importancia de la honestidad y la confianza en nuestras relaciones. Aunque ’Avraham tenía razones comprensibles para temer por su vida, su decisión de ocultar la verdad no solo puso en peligro a su esposa, sino que también socavó la confianza que ’Avimelekh había depositado en él.

וּבָרוּךְ אֵל עֶלְיוֹן אֲשֶׁר־מִגֵּן צָרֶיךָ בְּיָדֶךָ וַיִּתֶּן־לוֹ מַעֲשֵׂר מִכֹּל׃
"Y bendito sea el Di-s Altísimo, que ha entregado a tus enemigos en tu mano, y dio [’Avram] el décimo de todo" Bᵉreshit 14:20

La fidelidad de Di-s es eterna y podemos confiar en que Él cumplirá sus promesas y nos guiará en nuestro camino. Su fidelidad nos brinda seguridad y nos anima a confiar en Él en todo momento.